¿Qué es la sensibilidad dental?
Seguro que lo has notado alguna vez, especialmente tomando algo frío (como un helado, por ejemplo) o bien caliente, como un delicioso café. Justo cuando empiezas a saborearlo, sientes un dolor intenso y agudo en tus dientes, que sin embargo desaparece rápidamente en cuanto retiras de tu boca la bebida o comida en cuestión.
Esto es una señal inequívoca de que tienes sensibilidad dental, una dolencia (que no enfermedad) que padece entre el 20 y el 35% de la población y por la que no debes tener una mayor preocupación que la de acudir a tu dentista. Dentro de que la sensibilidad dental es bastante molesta, la buena noticia es que tiene muy fácil solución y no suele traer complicaciones. Eso sí, es muy importante no dejarla pasar y “resignarse a convivir con ella”.
Para hacer más fácil la lectura del blog, hemos llamado sensibilidad a lo que se conoce técnicamente como hipersensibilidad. Y nos hemos limitado a las causas diferentes de la caries dental, generalmente fácil de detectar y que tiene tratamientos específicos.
¿En qué consiste exactamente la sensibilidad dental y cuál es su causa?
La sensibilidad de los dientes ocurre cuando la dentina, que es la parte más blanda del diente situada bajo el esmalte dental, queda expuesta como consecuencia de la pérdida de protección que les otorga el esmalte y el cemento que la cubren.
La dentina contiene unos tubos microscópicos, que cuando se quedan sin esta protección, permiten que el calor, el frío y otros elementos externos, encuentren acceso hasta los nervios y las células interiores del diente, activando la sensación de dolor por hipersensibilidad.
Este es el motivo por el que sientes molestia intensa al tomar alimentos o bebidas fríos o calientes, aunque también es posible sentirla al tomar comidas ácidas, por ejemplo.
Como hemos apuntado al principio, seguramente lo hayas experimentado: dolor intenso y agudo, pero de duración corta, actuando normalmente mientras dura el estímulo. También puedes notar una sensación de pinchazo, o molestias al masticar.
No obstante, es importante que no lo dejes pasar, aunque sea relativamente sencillo dejar de sentir estas molestias, porque te está condicionando tu día a día: para evitar el dolor, dejas de tomar ese café, ese postre que te encanta o bien otros alimentos.
¿Crees que tienes que conformarte privándote de ellos? Nuestra respuesta es un “no” rotundo.
Así que prepárate para volver a sentir el placer de saborear tus comida y bebidas favoritas como antes, ¡estás muy cerca de conseguirlo!
Siendo sus causas muy diversas, algunas de las más frecuentes son:
- Cepillarse los dientes con fuerza excesiva: puede exponer la raíz del diente o erosionar la primera capa del diente, el esmalte, dejando la dentina desprotegida.
- Tomar bebidas o comidas ácidas: es posible que su consumo afecte al pH de la boca, elevando su nivel de alcalinidad, lo que también contribuye a la erosión del esmalte.
- Uso de pastas de dientes blanqueadoras: algunas de ellas tienen un efecto abrasivo sobre el esmalte y la dentina, provocando sensibilidad.
- Uso de algunos colutorios.
- Bruxismo: este trastorno puede incidir en el desgaste del esmalte y la aparición de la dentina, facilitando así la aparición de sensibilidad dental.
Si bien es bastante sencillo que tú mismo te detectes un caso de sensibilidad dental, hay que tener en cuenta que, si el dolor se siente en momentos distintos a los del contacto con alimentos fríos, calientes o ácidos, la sensibilidad puede tener otro origen como, por ejemplo, una o más caries.
Por eso, es muy importante contactar con profesionales, como los que encontrarás en cualquiera de nuestras clínicas, para determinar el origen de la sensibilidad para, posteriormente, indicarte los pasos a seguir para librarte de esta molestia que te impide disfrutar de las pequeñas cosas de la vida. Te lo mereces, ¿no crees?
Tratamiento para la sensibilidad dental
Has de saber que existen varios tratamientos, y muy eficaces, para abordar la sensibilidad dental, como:
- Láser de diodo
- Pastas y colutorios desensibilizantes
- Cubrimiento radicular o de la dentina expuesta
De ellos, el láser de diodo es considerado actualmente el medio más eficaz para la desensibilización de los dientes. Consiste en el sellado de los tubos de la dentina mediante coagulación o taponamiento de los mismos, permitiendo mejorías muy prolongadas con una intervención breve e indolora.
Además, es posible tratar la sensibilidad dental utilizando pastas y colutorios desensibilizantes, aunque su efecto no suele ser tan inmediato ni efectivo como el que conseguimos gracias al láser de diodo.
Por último, el tratamiento con cubrimiento radicular o de la dentina expuesta, consiste en cubrir la raíz de un diente o la dentina expuesta con un material de relleno, lo que también se puede utilizar para fines estéticos.
Si bien ofrece muy buenos resultados, es más invasivo, menos cómodo de seguir que los anteriores y requiere de más visitas al dentista, aunque, dependiendo del origen de la sensibilidad dental y su intensidad, puede ser el más adecuado.
La sensibilidad puede mitigarse por alguno de los tres procedimientos. De forma poco frecuente, algún diente podría necesitar desvitalización para recuperar la calidad de vida habitual.
De ahí, la importancia de consultar con profesionales de tu confianza para que te ayuden a escoger el tratamiento más indicado para ti.
Es momento de disfrutar de lo que te gusta
Llegados a este punto, y si estás dejando de comer o beber algunas de tus comidas o bebidas favoritas por no sentir dolor, es momento de tomar una decisión que sólo puede significar una mejora para ti.
Contacta con nosotros y sorpréndete de lo sencillo que es, de la mano de Centro Dental Torres, que la sensibilidad dental deje de molestarte y condicionarte. ¡Es hora de volver a disfrutar sin impedimentos!
¿Te apuntas?
Destacado odontólogo con una licenciatura en Odontología de la Universidad de Zaragoza. Es un experto en cirugía oral, implantología y periodoncia, respaldado por un Máster en Periodoncia e Implantología Oral de la misma universidad. Su formación incluye estética dental, prótesis fija y técnicas avanzadas, como odontología láser y anestesia local. Además, compartió su conocimiento en congresos nacionales e internacionales y está certificado en soporte vital básico.